domingo, 20 de abril de 2014

CAPE EPIC 2014

Ahora ya hace casi un mes que volvimos de Sudáfrica.
Tiempo que me he dejado para intentar ver las cosas con un poco mas de objetividad, después de poder disfrutar de una de las carreras más importantes del mundo de btt. La Cape Epic.

La verdad es que cuando Carlos me propuso ir a la Cape Epic, no creo que dudara ni un solo momento. Es de esas carreras a las que siempre has querido ir, y además quien me hacía la propuesta, era una persona, que realmente no conocía, pero con la que había pasado cortos pero muy buenos momentos.

 Junto a Carlos mi compañero en la Cape Epic. Antes de la salida del último dia.

La Cape, es una carrera que se puede ver con muchos ojos, como todo en la vida… Por mi parte, la viví, no desde un punto de vista competitivo, sino desde un punto de vista más… de finisher. Y os aseguro que la disfruté y mucho, pero tambien la sufrí, y mucho!!

Tengo poca experiencia en carreras de btt por etapas (de hecho solo he corrido una, Trans Alp Bike), pero si tengo experiencia en carreras de varios días en distintos deportes, y en viajes largos en bici. Así que creía estar preparado tanto físicamente como mentalmente para soportar lo que la Cape me deparara.
Los entrenos para poder correr la Cape, se tradujeron en muchos kilómetros a pie, ya que estaba preparando la Transgrancanaria de 120kms a pie, justo unos 20 días antes de dar comienzo la Cape. Pero por suerte, con las pocas salidas en bici que hice durante esos 20 días y los entrenos a pie, llegue en optimas condiciones.

Para lo que no estaba preparado, fue lo que me ocurrió una semana antes de volar hacía Sudáfrica.



Para ir a la Cape, pude contar con la ayuda de los “Tonis”, los únicos finishers que repetían en el equipo en el que iba a correr. Ellos nos pusieron un poco al día de lo que nos íbamos a encontrar, tanto incomodidades como facilidades que la organización nos iría ofreciendo durante la carrera. Entre ellas duchas de agua caliente todos los días, buena comida, servicio de lava ropa, dormir en tienda, lavabos químicos, largos recorridos, no muy técnicos, no con mucho desnivel…. Cada uno que saque sus conclusiones de que es incomodo y que cómodo. Por mi todo fue mas que correcto!! O sea mas facilidades que dificultades. (Evidentemente lo de técnicos o no, y lo del desnivel, lo digo comparándola con otras carreras… que la Cape… tiene de todo y mucho)

Bonitos paisajes. Muchas colinas y siempre las grandes montañas de fondo.

Pues bien, la Cape empezó para mi, con un afección del nervio motor de la parte derecha de mi cara…. Eso significa que me quedé paralizado, por un inflamación del nervio motor (el que hace que los músculos se muevan).
A eso le llaman parálisis facial, y hay de muchos grados, y la mía llegó a ser casi absoluta.
Así que no podía mover ningún musculo de la parte derecha de la cara, con los problemas que eso da al hablar, comer, gesticular en una conversación, y lo peor, montar en bici.
Al no poder mover ningún musculo, no podía cerrar el ojo, cosa que me preocupaba y mucho. Pues al montar en bici, todo el aire y porquería se me metía en el ojo derecho sin poder protegerme de ello con un simple pestañeo!!
Eso ocurría el lunes antes de empezar la Cape, a solo 6 días del prologo!!
Con la recomendación medica de no ir a la Cape… y quedarme para poder hacer un mejor seguimiento de la lesión.
Hay gente que no recupera la movilidad total, o sea que es bastante frecuente sufrir secuelas. Y una de las peores son las ulceras en el ojo por falta de lubrificación, ya que no se pestañea y el ojo se seca.


No es que este guiñando el ojo... sino que mi cara se deformaba con un gesto tan simple como sonreir.

Pero aunque se lo comenté a mi compañero, decidimos, bueno, decidí que iba. Y si a malas no podía correr… pues seguiría la carrera desde un coche… con el equipo de filmación!!
El equipo en el que yo me integraba, era el de Imparables. GAES, Protextrem y Phorte Farma eran los espónsors.
Junto con Santi Millan, el “prota”!! del programa, estaban Josef Ahram, Rafael Medina, Diego Sarasketa, Toni Gaso , Toni Perez y Carlos Ortet mi compañero como os dije antes.
Tuve la suerte de tener un compañero excelente, que me ayudo en todo momento, en el cuidado de mi ojo!! Por ejemplo, llevábamos y me colocaba gotas lubrificantes en mitad de etapa.
Otra de las grandes suertes, sobretodo para mi tranquilidad, fue que dentro del equipo GAES, estaban varios otorrinos, que con su experiencia, me fueron contando la posible evolución que sufriría el proceso inflamatorio y lo rápido o no de su recuperación. 
Gracias a todos por el cuidado y ayuda!!!
Los primeros días en bajadas no veía muy bien… daba un poco de miedo enchufarse ya que cuando venía alguna dificultad, al no verla me estresaba un poco…. Además el segundo día, corrimos en barro… yo no podía sacarme las gafas por el peligro a que entrara algo en el ojo… pues este no se cerraba solito, y debía ser yo quien lo cerrara voluntariamente (y no del todo), o cuando muscularmente estaba cansado, incluso debía hacerlo con el dedo. Así que imaginaros llevar unas gafas llenas de barro y saber que aunque no veas… mejor llevarlas!!

La Cape consta de 718kms, divididos en 7 etapas y 1 prólogo.
El primer día se corre el prólogo que sirve para dar espectáculo, posicionar a los equipos para los cajones de salida del día siguiente, y poner las piernas a punto.
Nuestro equipo por un error en la organización, salía con los equipos “pro”. Eso nos creó mas estrés negativo que positivo. Los equipos mas fuertes nos alcanzaban y debíamos parar para no molestar. Eso son muchas paradas!!! Y la consecuente perdida de ritmo.


 Bonitas bajadas por buenos senderos. Disfrute a tope!!

Las otras etapas, eran largas entre los 66 y los 134 kms. Las más difíciles según la organización, eran las impares… 1er, 3er y 5nto día.

Aunque había cortes, los primeros días no tuvimos que preocuparnos. Pero a partir de la etapa 5, tuvimos que estar un poco mas al “loro”.

En la noche anterior a la que debía ser la etapa más dura, la 5ª, sufrí una diarrea.
Por la mañana, justo antes de salir, mientras desayunábamos, me desmayé.
Supongo que todo debido a una bajada de tensión arterial.
Normalmente tengo la presión baja, y supongo que con la deshidratación y demás, mi presión bajo tanto que me caí redondo!!
Los compañeros me llevaron en brazos hasta el servicio médico, y allí desperté justo cuando me metían en la camilla.
Me “sirvieron” un litro entero de suero!!!
Lo mejor fue la cara de Carlos al decidir yo salir una vez terminaron de chutarme el suero!!
Al principio fue duro pues estaba deshidratado y no había comido. O lo que había cenado, estaba ya más fuera que dentro de mi cuerpo.
Pero al final del día, me encontré bien, y pude terminar con buenas sensaciones!!!!
Suficientes para conseguir entrar en tiempo en los controles y la línea de llegada, ya que el lento inicio de etapa, y el que nos encontramos a un compañero totalmente deshidratado y con el cual nos quedamos durante 40’, hicieron que fuéramos durante varias horas al límite de los tiempos de paso y que no nos pillaran las “hienas” (corredores que cierran la etapa y que si te pillan… te sacan de carrera) por muy poquito.

Después de estos incidentes, la carrera ya siguió su curso de una manera mas normal. Alguna que otra reparación, y el cansancio que se iba acumulando en las piernas por el esfuerzo del día a día.
Sino recuerdo mal nos salieron unas 56h en 8 dias...

En la llegada del último día. Un lujazo poder disfrutar de ser finisher!!

Lo dejo aquí, y si quereis saber más, no os perdáis el Imparables de principios de mayo, en el que podréis ver todo lo que paso en la Cape!!!

Antes de terminar agradecer a todos los esponsors y gente que me ayudaron en la Cape. Sin ellos, no hubiera podido disfrutar de esta fantástica experiencia.

Protextrem, Omegafort, GAES, Forte Pharma, Zoopa, Orbea, Overstim’s, Rudy Project, Camelback y Buff.


Un saludo.